En el pasado ya existieron varios ejemplos de artistas y tecnología unidos para inventar instrumentos que transformarán movimientos corporales en sonido.

Uno de ellos The V Motion Project que usa todo el cuerpo para controlar sonidos a través de un dispositivo de entrada que es sensible a los movimientos, el resultado es un maravilloso aparato que une mapeo de proyección con un hackeo de movimiento y una interfase musical comandada por movimientos corporales. Todo el proceso está documentado en su web que explica como su software modificado le permite controlar a un músico programas como Ableton Live, mediante el movimiento de brazos y piernas. El grado de interacción entre software y gestualidad es mucho más complejo que sus antecesores por la cantidad de gestos corporales que se pueden ejecutar.

Quizás de ahora en adelante toda la discusión de cómo hacer que una presentación de música electrónica sea más interesante o alcance un verdadero estatus de Live Act se aclara un poco más con innovaciones tecnológicas de esta naturaleza y abre nuevas vías de creación para los músicos actuales.

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